Mantener nuestra buena imagen en el trabajo es fácil con unos sencillos consejos
Lo normal es que tengamos la costumbre de comportarnos de forma civilizada en nuestro trabajo. Respetar al resto de compañeros es fundamental, debido a que pasamos la mayor parte de nuestro tiempo en nuestro lugar de trabajo.
Sin embargo, todos tenemos algún compañero que pasa esto por alto, y que acaba resultando molesto. Si no quieres ser uno de ellos, te recomendamos seguir estos consejos:
- Pasar por encima de tus compañeros para ascender o solucionar tus problemas. Uno de los mayores motivos de conflicto suele ser “apuñalar” a tus compañeros en cualquier ocasión para salvarnos a nosotros mismos o incluso para ascender.
- Al trabajo se va a trabajar, ¡no lo olvides! Deja los chismes fuera de la oficina, porque ser el cotilla del grupo te hará tener muy mala imagen. Además, si los cotilleos llegan a oídos de las personas afectadas, pueden traerte muchos problemas. Lo mismo ocurre cuando mientes para salvarte.
- Dejar de quejarte. Las personas que están continuamente quejándose ante los compañeros, tienen peor imagen. Decir todo el rato que odias tu trabajo acaba bajando la moral del grupo y los jefes no ven bien a estas personas. No significa que no puedas pedir mejoras laborales o lo que consideras que es justo, pero hazlo a la persona adecuada y no generes mal ambiente de trabajo.
- Comer en tu puesto de trabajo, algunas comidas con mucho olor. Aunque tú no lo creas, al resto de compañeros puede molestarles.
- No te aísles en tu mesa de trabajo. Participa de la vida de la oficina, date unos momentos de descanso para hacer crecer las relaciones con tus compañeros. Cuando hay buen ambiente y conexión, se es más productivo.
Toma buena nota de nuestros consejos y tus compañeros siempre te valorarán de forma positiva.